Mos Maiorum, VIII (Otoño 2024)
Revista sobre Tradición, postmodernidad, filosofía y geopolítica
Hipérbola Janus
Editorial: Hipérbola Janus
Año: 2024 |
Páginas: 224
ISBN: 978-1-961928-20-6
En las postrimerías del año, a las puertas del 2025, nos complace presentar a nuestros lectores el segundo de nuestros números temáticos. Anteriormente, en el número VII de Mos Maiorum, decidimos dar un giro radical a la estructura de la revista, habiendo madurado ya ciertos fundamentos a nivel organizativo y de colaboraciones. Y ahora, con mayor seguridad que nunca, nos adentramos en un nuevo tema, quizás uno de los más trascendentales en el momento histórico en el que nos hallamos. Nos aproximamos al ecuador de los años veinte del siglo XXI, y el Occidente posmoderno parece hacer aguas en todos los frentes, desangrando a las sociedades sobre las que su yugo asfixiante ejerce su poder.
Llevamos más de un lustro asistiendo a la intensificación de determinados discursos que, poco a poco, y de manera subrepticia nos proponen Agendas verdes, moradas y multicolores, teorías del decrecimiento, destrucción de modelos de vida y una presión cada vez más agobiante de los poderes transnacionales a través de gobiernos que traicionan a sus pueblos y son servidores de intereses espurios.
¿Qué destino nos aguarda a los europeos? ¿Existe alguna alternativa viable al Occidente que se desmorona ante nuestros ojos? La respuesta, o una de las respuestas —probablemente la más importante— debemos buscarla en la configuración del tablero de ajedrez mundial, en la geopolítica, que es el tema central de nuestro dossier. Hoy, más que nunca, es necesario recuperar los textos de la geopolítica clásica y alternativa de un Carlo Terracciano, por ejemplo, entre otros muchos autores, que a lo largo del presente libro van a ser protagonistas, directos o indirectos, a través de sus ideas y sus análisis más preclaros sobre el tema del «Eurasianismo». Eurasia, lo queramos o no, es un concepto geopolítico que está ahora mismo en boga, y su formulación y síntesis original no adquiere su forma definitiva en la Europa occidental, sino que ha sido una doctrina desarrollada en el Este, en Rusia, desde autores como Lev Gumiliov o Nikolái Trubetskói, como autores clásicos en los primeros desarrollos de la doctrina, que posteriormente se ha visto actualizada y ha adquirido una trascendencia y dimensión de primer orden a raíz de las teorizaciones del polémico filósofo y geopolítico Aleksandr Duguin.
No pretendemos caer en discursos maniqueos, ni tampoco convertirnos en un panegírico consagrado a la defensa a ultranza de un determinado discurso, idea o doctrina, sino que nuestra intención es penetrar en lo profundo del tema, conocer el Eurasianismo como doctrina, en su evolución, desentrañando sus características y ofreciendo al lector una visión «desde el otro lado», desde los discursos menos convencionales, y también menos sistémicos, capaz de ofrecer un enfoque lo más claro y diáfano posible, sin recurrir, como decimos, a discursos apologéticos ni a adhesiones fanáticas. Pero tampoco practicamos la equidistancia ni la neutralidad tan característica del espíritu burgués y las componendas de sus falsas democracias parlamentarias, y por eso profesamos una nada disimulada antipatía hacia el Occidente moderno y sus valores mediocres y pusilánimes.
En este número, en el dossier, como a lo largo de toda nuestra trayectoria, nos asiste un elenco de autores de reconocido prestigio, contamos con las firmas de Claudio Mutti, Daniele Perra, Diego Fusaro, Carlos X Blanco, Daniel Artur Branco, Guillermo Mas Arellano, David Lara Miguez, Pietro Missiaggia y Luis Landeira. Sin embargo, hay algo que tenemos muy claro, y es que los «valores» del Occidente posmoderno representan la decadencia absoluta, la destrucción de lo más profundo y auténtico del hombre europeo, representan esa antropología negativa y desviada que nos aboca a un callejón sin salida que queremos eludir por todos los medios. Una Europa reducida a la insignificancia en el concierto internacional, convertida en un juguete roto en manos del Imperialismo yanqui, que desde 1945 hasta nuestros días nos ha reducido a una mera frontera exterior, funcional a sus intereses, una especie de parapeto tras el cual dirige sus políticas de sumisión y chantaje, con sus bases militares y un afán expansionista a través de la OTAN que nos ha llevado directamente a una conflagración de proporciones y consecuencias imprevisibles dentro del propio espacio geopolítico ruso, con una guerra en Ucrania que todavía permanece activa y amenaza con una escalada, con una III Guerra Mundial y un auténtico holocausto nuclear.
Ante la deriva de los acontecimientos, desde Mos Maiorum queremos analizar la viabilidad de alternativas al actual orden de cosas, sustraernos a las ataduras, a las imposiciones de los mass media, cada vez más agresivos, contra la libertad de expresión y por el control del relato. La Europa de los «bulos» y las «fake news», que no son sino otra estrategia para acallar críticas y contener a los espíritus disidentes, a quienes nos debemos a la Verdad y no creemos que resignarnos a morir, a ser absorbidos por el sumidero de la historia, sea una alternativa.
Ante todas estas circunstancias que concurren en el mundo actual tenemos suficientes razones y argumentos para cuestionar la uniformización bajo un modelo político, social antropológico y cultural que tiende a la homologación de todos los territorios y espacios geográficos englobados bajo el denominado Occidente. Una homologación que se desarrolla sobre el plano financiero, bajo los auspicios de un liberal-capitalismo global liderado por Estados Unidos. Son muchas las preguntas y cuestiones que se suscitan, y especialmente en relación al modelo unipolar que se impone a raíz de la caída de la URSS en 1991 y la imposición de un «Fin de la historia» por parte de uno de los teóricos liberales más conocidos de la época, Francis Fukuyama. ¿Representa la hegemonía estadounidense «el lado correcto de la historia»? ¿El globalismo responde a ese «fin último de la historia» como parte de la culminación de susodicha hegemonía? A partir de estas preguntas no podemos obtener respuestas satisfactorias, y menos cuando hablamos de un proyecto fracasado, que amenaza las raíces de la civilización europea y su propia existencia a medio-largo plazo.
Al mismo tiempo, el ámbito post-soviético también ha experimentado notables transformaciones en las últimas décadas, desde Yeltsin hasta Putin, que son los dos mandatarios que han regido los destinos de la Rusia postsoviética, hemos asistido a una revitalización de la doctrina euroasiática, que no podemos reducir exclusivamente al ámbito de la geopolítica, sino que también postula ideas que reivindican la especificidad de cada cultura, la pluralidad de las tradiciones o los vínculos con la tierra (valores telurocráticos), que sirven como freno ante el desarraigo y la destrucción de las identidades de los pueblos, la que se produce desde el mundialismo y la alta finanza plutocrática occidental.
Por ese motivo, en las páginas que siguen vamos a tratar de mostrar los aspectos que componen esta realidad emergente que existe tras el concepto de «Eurasia», que ya desde el punto de vista geográfico se extiende sobre una enorme masa de tierras que abarcan una realidad multicontinental, en la que se hallan implicadas Europa y Asia, con un enorme potencial en cuanto a recursos materiales y humanos, continentes unidos por innumerables vínculos históricos que trascienden los estrechos márgenes de la historia «occidental», que no europea.
Paralelamente, y no por ello de una importancia menor, debemos atender a los contenidos complementarios que ofrecemos al lector, y que comprenden temáticas variadas, relacionadas con la antropología tradicional, la metapolítica y la filosofía. En este último apartado contamos con las contribuciones realizadas por Franco Morini, Michele Ruzzai, Silvano Lorenzoni, Eddy Elvira Bedoya Argüelles y Carlos Andrés Gómez Rodas.
Para finalizar los breves comentarios que componen este editorial, queremos hacer mención de los 10 años de existencia que Hipérbola Janus, nuestro sello editorial, cumplió el pasado 12 de octubre, y que nos hace volver la vista atrás con cierta nostalgia, y mucho orgullo, por los orígenes modestos y el enorme idealismo del que viene precedido nuestro proyecto. Nacido una fecha de enorme simbolismo para el ethos Hispánico, seguimos adelante tras una década de aventuras, de un abnegado trabajo, movido por ese quijotismo que siempre invocamos como parte de nuestro proyecto, como esa pieza clave que nos impulsa hacia delante pero sin olvidar el pasado, al que nos sentimos profundamente unidos a través de la defensa de la Tradición.